NOTA EDITORIAL

El psicoanálisis ha alcanzado un desarrollo importante en Argentina, donde se practica y se enseña en muy diversos ámbitos. La Facultad de Psicología de la Universidad de Buenos Aires ha contribuido a que no sea ya una terapia prac­ticada por unos pocos profesionales médicos para pacientes de clase media alta ni una mera teoría al servicio de la crítica literaria. Alcanza a sectores marginales, se dispensa en los hospitales, incluso la medicina prepaga se aviene a su reco­nocimiento social en la medida en que puede cubrir parte de sus costos. El pa­ciente, en muchos casos agradecido, no solamente de tener una atención perso­nalizada, sino la posibilidad del encuentro con alguien dispuesto a escuchar eso que para los demás es dolor sin ninguna causa, es excusa, es capricho, es inad­misible, es delirio, cuando para él, al menos en este momento es el problema decisivo de su existencia.
La Universidad de Buenos Aires ha contribuido en gran medida no sólo a su difusión a través de la enseñanza de grado y de posgrado en todos sus niveles también a través de actividades de extensión que incluyen servicios que brindan atención psicoanalítica gratuita a quienes no tienen actualmente posibilidad de pa­garlo. Y además, desde los años 90, la UBA ha posibilitado su inserción en la in­vestigación académica bajo la forma de la participación de sus docentes y alumnos en proyectos de investigación y en publicaciones cientifcas que cumplen con los requisitos exigidos actualmente a tales publicaciones.
La Revista Universitaria de Psicoanálisis esta dedicada especifcamente a dar lugar a aquellos resultados de investigación que corresponden a este campo de elaboración de saber y a sus aplicaciones, a sus elaboraciones conceptuales y clínicas, de actualidad y de intersección con otras disciplinas cientifcas y con el arte, segun se puede constatar en el contenido de esta entrega. La Revista Uni­versitaria de Psicoanálisis alcanza su volumen 12; desde hace años esta incor­porada al Núcleo Básico de Revistas Científicas Argentinas, y su acreditación por CAICYT-CONICET fue confirmada en agosto de 2012.
Agradezco a los evaluadores que efectivamente participaron en este número, a la Secretaría de Investigaciones y en particular al Lic. Carlos Vitti, por su trabajo sostenido en el trabajo de gestión editorial, y a la Lic. Vanina Mura ro por la revisión de los textos con la dedicación y agilidad de siempre.

Gabriel Lombardi